Introducción a la ELA
La esclerosis Lateral Amiotrófica, o ELA, es una enfermedad relativamente difícil de entender y tratar. Afecta aproximadamente de uno a dos por cada 100,000 personas en los Estados Unidos cada año.
Casi el 95% de los casos de ELA son causados por factores desconocidos, y solo alrededor del 5% son heredados genéticamente de los padres. Aunque la ELA suele afectar a personas de entre 50 y 60 años, puede afectar a personas de cualquier edad.
¿existe una cura para la ELA?
Desafortunadamente, no hay cura conocida para la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), y el pronóstico actual es de dos a cuatro años desde su inicio. Los avances recientes en la tecnología de células madre han proporcionado nuevas herramientas para que los investigadores luchen contra la ELA, así como posibles nuevos tratamientos para los propios pacientes. La terapia con células madre puede retrasar la progresión del estado de la enfermedad. Sin embargo, se deben realizar estudios de investigación a más largo plazo para establecer la eficacia del tratamiento.
¿Qué es la ELA?
La Esclerosis lateral amiotrófica (ELA) ocurre cuando el cuerpo comienza a experimentar la muerte de las neuronas que controlan los músculos voluntarios.
LA ELA afecta a las neuronas motoras superiores e inferiores, lo que significa que los pacientes con la enfermedad comienzan a experimentar tanto espasticidad involuntaria como debilitamiento de los músculos con el tiempo. Esta espasticidad involuntaria provoca un empeoramiento de los síntomas.
los Síntomas de la ELA
- Dificultad para hablar
- la Dificultad de movimiento
- Dificultad para respirar
- calambres Musculares
- rigidez Muscular
- Arrastrada
drogas Puede ayudar a los pacientes con ELA?
Actualmente hay medicamentos disponibles, que aumentan ligeramente la duración de la vida y mejoran la calidad de vida, pero no existe una cura aceptada para la ELA en la actualidad. En los últimos años ha habido un impulso para crear conciencia sobre la ELA en un intento de promover la investigación para encontrar una cura. Este aumento de la conciencia se observó de manera más notable en 2014 con la introducción del Desafío de Cubos de Hielo ELA.
La terapia con células madre puede ser una opción de tratamiento viable para la ELA. Las células madre pueden ser una solución viable para sostener y nutrir las neuronas motoras enfermas. (1)
Según Goutman et al.
» La premisa de la terapia con células madre para la ELA tiene como objetivo mejorar el microambiente enfermo. Mientras que las células madre son incapaces de reemplazar directamente a las neuronas motoras enfermas, las células madre trasplantadas secretan factores neurotróficos y se diferencian en células de apoyo, como astrocitos y microglía, generando un entorno neuroprotector que puede retardar la degeneración de las neuronas motoras.»(1)
Los investigadores han recurrido a las células madre en la lucha contra la ELA por dos razones principales.
- Los médicos necesitan un amplio suministro de células de muestra de ELA para probar los tratamientos. Afortunadamente, un tipo de célula madre llamada Célula Madre Pluripotente Inducida (IPSC) puede imitar de cerca las neuronas afectadas por la ELA. Los investigadores solo necesitan pequeñas muestras de piel de pacientes con ELA para crear una cantidad indefinida de IPSC en el laboratorio, lo que permite realizar pruebas continuas en células genéticamente idénticas a las de los pacientes. Esta capacidad proporciona un beneficio masivo a los médicos de todo el mundo que buscan diferentes formas de tratamiento, todo sin causar más daño a los pacientes de ELA.
- Las células madre se utilizan en ensayos para tratar la ELA directamente. Las células madre pueden buscar daños en el cuerpo y reemplazar células de cualquier tipo. Por esta razón, los trasplantes de células madre se utilizan actualmente para proteger las neuronas sanas de un paciente, así como para cultivar potencialmente nuevas células para reemplazar a las que han muerto.
Ensayos de células madre para ELA publicados
Un estudio realizado por Panayiota Petrou et al. en 2016, se descubrió que la terapia con células madre era segura y bien tolerada por los pacientes con ELA.
» Entre los 26 pacientes, el 87% se definió como respondedores a la Escala de Valoración Funcional de la ELA-Capacidad vital revisada o forzada, con una mejoría de al menos el 25% a los seis meses del tratamiento en la pendiente de progresión.»(2)
Los investigadores esperan que tratamientos como este puedan eventualmente ralentizar para detener la progresión de la ELA, mejorando enormemente los resultados de los medicamentos actuales en el mercado.
Tratamiento con células madre para la ELA en la DVC Stem
La terapia con células madre puede tener la capacidad de ralentizar la progresión de la ELA. Esto se lleva a cabo a través de la capacidad de las células madre para diferenciarse en tipos únicos de células de apoyo, como astrocitos y microglía (células dentro del sistema nervioso central). Estas células de apoyo pueden tener la capacidad de retardar la degeneración de las neuronas motoras dentro del SNC.
DVC Stem es un pionero de la terapia con células madre, que ofrece terapias con células madre durante años y se ha convertido en una piedra angular de la industria del turismo médico. Ubicado en el paraíso tropical de Gran Caimán en el Caribe Occidental, ofrecemos a los pacientes una alternativa cercana a viajar largas distancias y a lugares menos ideales. Nuestros protocolos están aprobados por IRB, y nuestras células provienen de laboratorios regulados, con sede en los Estados Unidos y que cumplen con la FDA. Buscamos ofrecer productos de la más alta calidad, los últimos tratamientos disponibles para una variedad de condiciones, todo combinado con un entorno y servicio de clase mundial. Póngase en contacto con nosotros hoy mismo para solicitar información adicional.
(2) Petrou P, Gothelf Y, Argov Z, et al. Seguridad y Efectos Clínicos del Trasplante de Factores Neurotróficos Secretores de Células Madre Mesenquimales en Pacientes con Esclerosis Lateral Amiotrófica: Resultados de los Ensayos Clínicos de Fase 1/2 y 2a. JAMA Neurolog. 2016;73(3):337–344. doi:https://doi.org/10.1001/jamaneurol.2015.4321