El uso de insecticidas sigue siendo el procedimiento básico para controlar la mayoría de los ectoparásitos, pero se están desarrollando varios métodos para actuar además o en sinergia con estos productos, a fin de mejorar la eficacia y reducir los efectos adversos de los insecticidas, contribuyendo a estrategias ecológicamente aceptables. Estos métodos se clasifican como control ecológico( modificación del entorno del parásito), control biológico (depredación, parasitismo, acción de patógenos, etc.), control genético (liberación de machos estériles, hibridación, manipulaciones genéticas) y control mecánico (trampas para insectos, uso de repelentes). La aplicación de estos métodos depende de las características biológicas y ecológicas del ectoparásito, y pueden actuar directa o indirectamente, afectando la mortalidad y/o la reproducción. Los autores revisan los principales métodos aplicables a los principales grupos de ectoparásitos de interés veterinario. Los métodos no químicos son objeto de investigaciones prometedoras y de gran alcance, en particular a la vista de los recientes avances de la biotecnología.