Bienvenido a nuestra serie que le trae contenido original de personas en las noticias. Lo llamamos «Textualmente» porque estas publicaciones permitirán que los autores hablen por sí mismos.

Hoy, al comenzar la Convención Nacional Demócrata, presentamos a la presunta candidata Hillary Clinton. (Habríamos citado a Donald Trump la semana pasada, pero no pudimos localizar ninguno de sus escritos en nuestra biblioteca digital. En 1995, cuando era la Primera Dama, pronunció un discurso en la Cuarta Conferencia Mundial de las Naciones Unidas sobre la Mujer en Beijing titulado «Los Derechos de la Mujer son Derechos Humanos.»Comenzó así:

Aquellos de nosotros que tenemos la oportunidad de estar aquí tenemos la responsabilidad de hablar por aquellos que no pudieron.

Como estadounidense, quiero hablar por las mujeres de mi propio país, mujeres que están criando a sus hijos con el salario mínimo, mujeres que no pueden pagar la atención médica o el cuidado de niños, mujeres cuyas vidas están amenazadas por la violencia, incluida la violencia en sus propios hogares.

Quiero hablar por las madres que luchan por buenas escuelas, vecindarios seguros, aire limpio y ondas de aire limpias; por las mujeres mayores, algunas de ellas viudas, que han criado a sus familias y ahora encuentran que sus habilidades y experiencias de vida no se valoran en el lugar de trabajo; por las mujeres que trabajan toda la noche como enfermeras, empleadas de hotel y cocineras de comida rápida para que puedan estar en casa durante el día con sus hijos; y por las mujeres en todas partes que simplemente no tienen tiempo para hacer todo lo que se les pide que hagan cada día.

Hablando con ustedes hoy, hablo por ellos, al igual que cada una de nosotras habla por las mujeres de todo el mundo a las que se les niega la oportunidad de ir a la escuela, o ver a un médico, o poseer propiedades, o tener voz sobre el rumbo de sus vidas, simplemente porque son mujeres. La verdad es que la mayoría de las mujeres de todo el mundo trabajan tanto dentro como fuera del hogar, generalmente por necesidad.

Necesitamos entender que no hay una fórmula para cómo las mujeres deben llevar sus vidas.

Usted puede leer el discurso completo y descargar el PDF aquí.