Patologizar es la práctica de ver un síntoma como indicación de una enfermedad o trastorno. En salud mental, el término se usa a menudo para indicar un diagnóstico excesivo o la negativa a aceptar cierto comportamiento como normal.

¿Qué es la Patologización?

Algunos críticos dentro y fuera del campo de la salud mental argumentan que los terapeutas, psicólogos y psiquiatras tienden a sobre patologizar el comportamiento normal. Esto puede llevar a un diagnóstico excesivo y al uso excesivo de drogas psicoactivas. Por ejemplo, algunos defensores han argumentado que el creciente número de niños diagnosticados con déficit de atención con hiperactividad (TDAH) sirve como evidencia de que las personas en las profesiones de ayuda tienden a patologizar el comportamiento normal de la infancia.

Otros ejemplos de patologización de profesionales de la salud mental pueden incluir:

• Decirle a una persona que todos sus problemas de relación se deben a su trastorno de salud mental
• Negarse a responder preguntas y decirle a una persona que su desconfianza en el proceso es parte de un problema de salud mental
• Uso excesivo de medicamentos psicotrópicos para afecciones que pueden no requerir dicho tratamiento
• El uso de un diagnóstico para controlar a las personas, en particular a los niños
• Tratar el incumplimiento de las recomendaciones como evidencia de un trastorno psiquiátrico

Riesgos de patologizar

Mientras que el comportamiento de algunas personas puede de hecho, evidencia una condición médica o de salud mental, ninguna condición o trastorno puede afectar cada comportamiento o pensamiento individual que tiene una persona, y la patologización tiende a negar los sentimientos, las necesidades y los pensamientos de las personas con diagnósticos de salud mental.

La patologización también puede, paradójicamente, hacer que los problemas de salud mental se traten con menos seriedad. Si un gran número de personas en una población tiene un diagnóstico particular, entonces la afección no puede ser tan grave. Los proveedores de tratamiento que patologizan a sus clientes en lugar de escuchar pueden ver menos cumplimiento de las recomendaciones de tratamiento y es posible que no hagan diagnósticos precisos. La patologización también puede paralizar a una persona y dificultarle hacer cambios en su estilo de vida. Por ejemplo, si un psiquiatra le dice a una persona que sus dificultades en su matrimonio se deben únicamente a su depresión, es menos probable que trabaje en el matrimonio o deje a un cónyuge abusivo.