Peter Kürten, apodado Vampiro de Düsseldorf, (nacido el 26 de mayo de 1883, Colonia-Mulheim, Alemania.- murió el 2 de julio de 1931, Colonia), asesino en serie alemán cuya carrera ampliamente analizada influyó en la comprensión de la sociedad europea del asesinato en serie, la violencia sexual y el sadismo en la primera mitad del siglo XX.
Kürten, el tercero de 13 niños, experimentó una infancia violenta. Su padre, un alcohólico abusivo, fue encarcelado durante tres años por intentar abusar de la hermana de 13 años de Kürten. Antes de cumplir 10 años, Kürten aparentemente había asesinado a dos compañeros de escuela. Durante su adolescencia cometió numerosos delitos menores, y en el momento de su último arresto había sido condenado a prisión casi 30 veces. En el área de Düsseldorf, de febrero a noviembre de 1929, cometió una serie de asesinatos brutales y sádicos.
El juicio de Kürten se convirtió en un evento nacional, atrayendo a muchos observadores académicos, así como a los meramente curiosos. Relató con franqueza los detalles de sus crímenes al célebre psicólogo Karl Berg, cuyo El Sádico (1932) se convirtió en un clásico de la literatura criminológica. Según Berg, Kürten era un psicópata sexual y sus crímenes representaban un ejemplo perfecto de Lujuria, o asesinato por placer. En su juicio por nueve cargos de asesinato y siete cargos de intento de asesinato, Kürten fue colocado en una jaula especial para evitar su fuga. Fue condenado a muerte y ejecutado por guillotina.
La biografía de Berg de Kürten influiría en última instancia en todos los estudios posteriores sobre el asesinato en serie. El caso también tuvo un impacto en la cultura popular, sirviendo como base de la película de Fritz Lang M (1931), en la que Peter Lorre interpreta memorablemente a un personaje similar a Kürten.