Alfredo Stroessner, en plena Alfredo Stroessner Matiauda, (nacido en Noviembre. 3, 1912, Encarnación, Párr.- murió ago. 16, 2006, Brasilia, Braz.), líder militar, que se convirtió en presidente de Paraguay después de liderar un golpe de estado del ejército en 1954. Uno de los gobernantes más antiguos de América Latina, fue derrocado en 1989.
Stroessner, hijo de un inmigrante alemán, asistió al Colegio Militar de Asunción y fue comisionado en el ejército paraguayo en 1932. Ascendió de rango hasta convertirse en general y en 1951 fue nombrado comandante en jefe de las fuerzas armadas. En 1954 depuso al presidente Federico Chávez y más tarde asumió la presidencia después de una elección en la que fue el único candidato para el cargo.
Stroessner intentó aplacar a los pobres de las zonas rurales y a los trabajadores urbanos y, al mismo tiempo, apoyó los intereses de los grandes terratenientes y empresarios. Su administración estabilizó la moneda, moderó la inflación y proporcionó algunas escuelas nuevas, instalaciones de salud pública y carreteras; una gran parte del presupuesto nacional, sin embargo, se gastó en las fuerzas paramilitares necesarias para preservar su autoridad. Durante la presidencia de Stroessner, Paraguay participó en la construcción de la enorme Presa de Itaipú a lo largo de la frontera entre Brasil y Paraguay en 1975-82. Los partidarios de Stroessner dominaron la legislatura y los tribunales de la nación y modificaron la constitución en 1967 y 1977 para legitimar sus seis elecciones consecutivas a la presidencia. Su administración participó activamente en la Operación Cóndor, una campaña clandestina coordinada por varios gobernantes sudamericanos para eliminar a sus oponentes. Fue responsable de numerosas detenciones extrajudiciales, extradiciones y otros abusos de los derechos humanos. Además, Stroessner permitió a Paraguay servir como refugio para varios fugitivos internacionales, incluido el criminal de guerra nazi Josef Mengele.
Stroessner fue elegido para un octavo mandato consecutivo como presidente en 1988, pero fue derrocado por un golpe militar en 1989. Posteriormente se exilió en Brasil, donde se le concedió asilo político. A principios del siglo XXI, Paraguay solicitó sin éxito su extradición por cargos relacionados con la Operación Cóndor.